Las vueltas a la vida
Categories: Latin American Narrative
Sebastián se fu, Sebastián vuelve. Y con ojos de recienvenido ve y no ve a la Buenos Aires que es. Y que se le confunde con la que dejó, con la que en su infancia fue, con la que quisiera ver. Esos ojos grandes, uh poco desconcertados, de hijo pródigo, con que regresan al hogar los que se fueron, como si fueran ellos los que tienen que hacerse perdonar. Pero Sebastián no viene a quedarse, no. De ninguna manera. Entonces, nada de sentir, nada de entregarse, jugar sí, con cierta levedad, tocar apenas Ia piel de los días, jugar. Y Alicia. Un fato, dice Sebastián. Casi nada, casi ninguna importancia, gozoso sexo, mucho sexo, alegre, deportivo sexo, dulce Alicia, jugar. Porque la vida está en otra parte, ¿no? En Canadá, en su trabajo, en su mujer, en sus proyectos de tener un hijo. Afuera. Y aquí, Alicia misteriosa, toda suya y sin embargo lejana, Alicia pasado, Alicia Buenos Aires. Final abierto, entonces, porque David Mibashan, contador de Sebastián y Alicia, inevitablemente, exiliadamente, se (nos) pregunta, mi Buenos Aires querida, cuando yo te vuelva a ver, ¿qué impresentido terremoto volverá a sacudirme las entretelas del cuore? (Ana María Shua)